MADRID (EP). La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha exigido mejores condiciones laborales y retributivas, así como otros incentivos, que ayuden a atraer y retener profesionales en la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria (MCyF).

Después de conocer que se han cubierto por primera vez en unos años las 9.007 plazas para Médico Interno Residente (MIR) ofertadas en la Formación Sanitaria Especializada (FSE), de las que 2.508 eran para MCyF, CSIF ha insistido en un comunicado en la necesidad de seguir incentivando esta especialidad.

La organización sindical ha denunciado las precarias condiciones laborales en la Atención Primaria (AP), donde ha criticado que los profesionales afrontan una excesiva carga de trabajo, no tienen el reconocimiento suficiente y no cuentan con incentivos.

En este sentido, ha reclamado una mejora de las condiciones laborales y retributivas de todos los MIR de Medicina de Familia en todas las comunidades autónomas con igualdad de salarios; incentivos, sobre todo para las plazas en zonas de difícil cobertura; y el incremento de la inversión en Sanidad, con al menos un 25 por ciento del presupuesto sanitario destinado a AP.

Además, el sindicato ha demandado que se incentive la figura de tutor de residentes tanto económicamente como a nivel curricular; se facilite la investigación y docencia durante el periodo formativo y también posteriormente; y se fomente la asignatura de AP, en su modalidad teórica y práctica, durante la formación universitaria.

CSIF también ha pedido un aumento progresivo de las plazas de médico de familia para cubrir el déficit estructural, que estima en una necesidad mínima de 9.500 médicos de AP para los próximos cinco o siete años. Según ha detallado, más del 50 por ciento de profesionales en activo tienen entre 50 y 65 años, y casi uno de cada cuatro entre 60 y 65 años.

Planes de verano

Por otra parte, la Central ha emplazado al Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas a comenzar a elaborar los planes de refuerzo estival para evitar la saturación de urgencias y el cierre de camas y centros de salud, como viene ocurriendo todos los años.

En este sentido, alude a un reciente estudio propio que revela que el 50 por ciento del personal de la Sanidad es temporal, un dato "alarmante" ante las necesidades de plantilla que se harán efectivas con motivo de vacaciones, y que se notará "de manera especial" en las zonas con gran afluencia turística.

Según ha explicado, la falta de plantilla obliga a la realización de guardias de muchas horas, noches, festivos, todo unido a una acumulación de tareas y encadenando contratos precarios. La misma falta de personal provoca que no se cubran las sustituciones por guardias, vacaciones o asuntos particulares, lo que conlleva una mayor carga de trabajo.

Al hilo, ha señalado que muchos de estos profesionales son responsables de amplias áreas geográficas por la falta de plantilla y deben recorrer grandes distancias hasta su centro de salud o para prestar atención domiciliaria, lo que conlleva además riesgo de agresiones físicas y verbales por la falta de medidas de protección y de prevención.