En el debate sobre el urbanismo y la vivienda en Valencia, a menudo nos centramos únicamente en las regulaciones, olvidando que la verdadera urgencia está en otro lado: la alarmante falta de oferta para una demanda que no deja de crecer.
En el último año, la ciudad de Valencia ha ganado 40.000 nuevos habitantes, pero la producción de obra nueva ha caído en picado. Según el Observatorio de la Vivienda, los testigos de obra nueva se han reducido un 80% en el último trimestre de 2024. Y si hablamos de vivienda protegida, el panorama es aún más desolador: apenas hay promoción activa en el municipio. En resumen, estamos dejando a miles de familias sin una opción real de acceso a una vivienda digna, en un contexto en el que cada vez más personas quieren vivir aquí.

- Alicia Mancheño.
Por eso, más allá de las nuevas normativas urbanísticas y de zonificación, lo que necesitamos con urgencia es liberar suelo y acelerar los plazos. Cualquier herramienta legislativa que dé seguridad jurídica en el desarrollo de suelo urbano, y que agilice las licencias de obra, será siempre bienvenida. Necesitamos actuar con determinación para equilibrar la oferta y la demanda, porque sin suelo, no hay viviendas. Y sin viviendas, no hay ciudad que crezca de forma sostenible.
Además, hay factores de incertidumbre que amenazan seriamente la viabilidad del desarrollo inmobiliario: el encarecimiento de los costes de construcción y la escasez de mano de obra cualificada. En Grupo Lobe llevamos años anticipándonos a esta realidad a través de la industrialización. Fabricamos nuestras propias fachadas, bastidores de instalaciones y escaleras industrializadas, lo que nos permite reducir tiempos de ejecución y costes, garantizando calidad. Aun así, seguimos muy preocupados por la evolución del sector laboral en construcción. Si no apostamos decididamente por la formación y la innovación, no podremos afrontar el futuro.
Por suerte, hay una tendencia que ha venido para quedarse y que desde Grupo Lobe abrazamos desde hace años: la sostenibilidad. Construimos y certificamos tanto vivienda libre como protegida bajo el estándar Passivhaus, y hemos demostrado que hacerlo no tiene por qué suponer un sobrecoste. Gracias a una década de trabajo, hoy podemos decir que la sostenibilidad está integrada en nuestro ADN constructivo, y que el cliente lo percibe no como un lujo, sino como una necesidad.

- Foto: GRUPO LOBE
Seguimos apostando fuerte por la Comunidad Valenciana. En Valencia capital, en el barrio de Turianova, acabamos de lanzar dos promociones: Nou Llar del Túria y Gran Tyrio, con un total de 228 viviendas, mitad protegidas, mitad libres, proyectos que se engloban en el Plan + Vivienda del Ayuntamiento de Valencia, a través del vehículo de la permuta, activando la colaboración público-privada. En Quart de Poblet estamos a punto de entregar 69 viviendas protegidas, y en otras provincias seguimos creciendo con proyectos en Castellón y Alicante.
El reto es claro: Valencia necesita más vivienda y menos trabas. Desde el sector privado estamos dispuestos a seguir invirtiendo, innovando y construyendo una ciudad más habitable. Solo pedimos que la administración nos acompañe y sea sensible a los problemas que tenemos para ir dando solución a un problema mayor, la falta de vivienda a nivel global.
Alicia Mancheño es directora de Comunidad Valenciana en Grupo Lobe