VALÈNCIA. El Comité Local de Emergencia y Reconstrucción (CLER) de Massanassa, una plataforma ciudadana surgida tras la Dana del pasado mes de octubre, ha impulsado dos mociones para el próximo pleno municipal del 29 de mayo. Una para solicitar la dimisión del president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y otra para declararlo persona 'non grata' en el municipio.

Las propuestas ya se han trasladado a los diferentes grupos políticos, aunque ninguno ha confirmado todavía su registro formal, un paso imprescindible para que lleguen a debatirse. Según explica el CLER de Massanassa a Valencia Plaza, estas iniciativas responden a la gestión de la emergencia por parte del Gobierno autonómico, al que responsabilizan de no haber emitido una alerta previa ante el desbordamiento del barranco del Poyo. 

Cabe recordar que la riada del 29 de octubre causó doce muertes entre la población del municipio, a las que se suma el fallecimiento de un trabajador de la empresa pública Tragsa en noviembre, mientras realizaba tareas de limpieza en el colegio Lluís Vives. Fuentes del comité lo atribuyen a una "temeraria y negligente gestión política". 

Según explica el CLER de Massanassa, las mociones se han enviado a los tres partidos con representación en el consistorio: el Partido Popular (8 concejales), que ostenta la alcaldía; el PSPV (4) y la coalición entre Esquerra Unida (EU) y Unides Podem, bajo la marca Per Massanassa (1). El comité señala que estos dos últimos grupos han asegurado que están trabajando en la iniciativa, aunque todavía no han confirmado su presentación conjunta en el pleno. 

Por su parte, el grupo popular no ha emitido ninguna respuesta a las mociones del comité. El pleno se celebrará el próximo jueves 29 de mayo, sobre las 20:00 horas, y coincidirá con una huelga general, así como una manifestación convocadas en el municipio por los siete meses de la Dana. 

Otras iniciativas impulsadas desde el comité

Desde su creación en enero de este año, el CLER de Massanassa ha desplegado una intensa actividad por la reconstrucción del pueblo. Organizado por comisiones temáticas, el comité ha centrado sus esfuerzos en la revisión de los planes de emergencia municipales, en la elaboración de propuestas técnicas para una recuperación más sostenible y en el acompañamiento a familias de las víctimas mortales.

A pesar de haber sido reconocido en abril como "interlocutor" por una declaración institucional del pleno, el comité denuncia "limitaciones persistentes" en su relación con el ayuntamiento. En ese sentido, señalan que, a día de hoy, no cuentan con un espacio público para celebrar sus reuniones mensuales. Y, aunque agradecen la presencia del alcalde, Paco Comes, en una de las asambleas del comité, creen que "podría implicarse más". 

Además de su labor de incidencia política, el comité ha impulsado acciones de apoyo psicológico, como las 'Trobades de malestar', y sesiones abiertas a la ciudadanía con especialistas en catástrofes y urbanismo, enmarcadas en el proyecto 'Escola CiutaDana'. Por otro lado, el CLER ha identificado necesidades urgentes en salud, vivienda e infraestructuras, que han trasladado directamente a la Concejalía para la reconstrucción y reactivación tras la riada. 

Una reconstrucción "desigual y lenta"

Pese a todos estos esfuerzos que describen desde el comité, la recuperación de Massanassa avanza de forma desigual y con lentitud. El CLER advierte de que muchas infraestructuras públicas siguen inutilizadas y que zonas enteras permanecen sin limpiar, sobre todo, en los alrededores de la plaza del País Valencià, considerada el epicentro de la catástrofe en el municipio.

En cuanto a la situación educativa, desde el comité la califican de "crítica". Los dos colegios públicos afectados en Massanassa permanecen, casi siete meses después, cerrados, por lo que el alumnado continúa reubicado en instalaciones provisionales fuera del municipio.

Según estima el CLER, la reconstrucción completa de estos centros "no se producirá antes de cuatro o cinco años", lo que implica que cientos de estudiantes cursarán buena parte de su escolarización "en condiciones precarias". El comité también alerta de la falta de planificación para abordar la reconstrucción de áreas como l'Albufera, los arrozales, el polígono industrial y los espacios sociales.

Con la temporada de lluvias torrenciales cada vez más próxima, "la sensación de vulnerabilidad e incertidumbre crece entre los vecinos", quienes perciben que las actuaciones desarrolladas hasta el momento "no han estado a la altura de la gravedad de la situación".

Por todo ello, el comité sostiene que el actual Consell "no garantiza una reconstrucción eficaz ni adaptada a las condiciones climáticas del territorio". Además de exigir responsabilidades políticas en la figura de Mazón, el CLER reclama la dimisión del equipo de Gobierno autonómico en su conjunto, al considerar que la gestión de la Dana "no ha sido transparente, participativa ni alineada con los principios de prevención, resiliencia o justicia social".